El croissant en un producto de bollería famoso en muchos países y muy habitual en nuestros desayunos y meriendas. Estos croissants integrales con chocolate son una buena manera de preparar un desayuno o merienda sano para nuestros peques y les aseguro, ¡les encantará!
No es una receta difícil de hacer, pero sí lleva su tiempo de amasado, así que paciencia porque realmente el resultado merece la pena. ¡No tienen nada que ver con los bollos industriales!
Cualquier dulce con chocolate ya es atractivo para los niños, estos croissants son muy saludables porque están elaborados con harina integral y están hechos en casa
Ingredientes
Para 12 croissants
No es una receta difícil de hacer, pero sí lleva su tiempo de amasado, así que paciencia porque realmente el resultado merece la pena. ¡No tienen nada que ver con los bollos industriales!
Cualquier dulce con chocolate ya es atractivo para los niños, estos croissants son muy saludables porque están elaborados con harina integral y están hechos en casa
Ingredientes
Para 12 croissants
- 140 gr. de harina de fuerza
- 130 gr. de harina integral
- 12,5 gr. de levadura fresca
- 1 huevo
- 100 ml. de leche
- 75 gr. de manteca o margarina blanda
- 80 gr. de azúcar
- 1 pizca de sal
- crema de cacao o Nutella para rellenar
- 1 yema y 1 cucharada de leche para pintar
Preparación
Dentro de un bol, disolvemos la levadura en la leche tibia, agregamos una pizca de sal y dejamos tapado con film durante 15 minutos aproximadamente. Mientras tanto, mezclamos las harinas con el azúcar.
En la multiprocesadora (con el accesorio de amasar) a velocidad medio-alta, agregamos los ingredientes secos a la leche con levadura y sin dejar de amasar, agregamos el huevo batido. Vamos agregando la manteca o margarina un trocito a la vez, amasando bien después de cada agregado. Cuando hemos incorporado toda la manteca o margarina, amasamos siempre a velocidad medio-alta por unos 10 minutos.
En la multiprocesadora (con el accesorio de amasar) a velocidad medio-alta, agregamos los ingredientes secos a la leche con levadura y sin dejar de amasar, agregamos el huevo batido. Vamos agregando la manteca o margarina un trocito a la vez, amasando bien después de cada agregado. Cuando hemos incorporado toda la manteca o margarina, amasamos siempre a velocidad medio-alta por unos 10 minutos.
Si no tenemos multiprocesadora, se puede hacer a mano pero hay que amasar mucho, así que armense de paciencia. Obtendremos una masa homogénea y elástica, blanda pero que no chorrea. Cubrimos la masa con un paño y dejamos levar en un lugar cálido hasta que doble su volumen, lo ideal es calentar el horno a 50 grados, apagarlo y poner la masa dentro, de este modo en aproximadamente una hora estará lista.
Extendemos la masa en forma circular sobre la mesa de trabajo que habremos espolvoreado con un poco de harina para que no se pegue y la cortamos en 12 triángulos. Hacemos un pequeño corte a la base del triángulo y estiramos las puntas, colocamos una cucharadita de relleno en el centro, cerca del borde, y enrollamos, formando el croissant. Colocamos sobre una fuente cubierta con papel de horno, bien distanciados entre si, y dejamos levar de nuevo (valen los mismos consejos) hasta que doblen su volumen.
Extendemos la masa en forma circular sobre la mesa de trabajo que habremos espolvoreado con un poco de harina para que no se pegue y la cortamos en 12 triángulos. Hacemos un pequeño corte a la base del triángulo y estiramos las puntas, colocamos una cucharadita de relleno en el centro, cerca del borde, y enrollamos, formando el croissant. Colocamos sobre una fuente cubierta con papel de horno, bien distanciados entre si, y dejamos levar de nuevo (valen los mismos consejos) hasta que doblen su volumen.
Pincelamos con la yema y la leche batidas. Si queremos, espolvoreamos con azúcar y horneamos a 180 (precalentado) durante 12 minutos, y ¡listos para comer!
Fuente: PequeRecetas
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